191. Hasta el final
Rylan
El silencio de la noche siempre fue mi lugar de refugio.
Ahí, entre el sonido distante de las hojas y el brillo frío de la luna, conseguía respirar. Olvidar por un segundo que mi corazón ya no estaba entero.
Pero esa noche... no era solo la soledad lo que me acompañaba.
Sentí su olor incluso antes de oír los pasos. Dulce, familiar.
Cerré los ojos por un instante, intentando decidir si debía voltearme o no. Mi cuerpo decía que sí, mi lobo aullaba por ella. Pero mi mente... ella siempre gritaba "cuidado".
Y entonces, sin previo aviso, sentí sus brazos a mi alrededor.
Suaves. Cálidos. Determinados.
Ella me abrazó por la espalda, como si ese gesto simple pudiera impedir que el mundo nos alcanzara. Apoyó el rostro en mi espalda y, por un segundo, no pude respirar.
Mis manos tocaron sus brazos con cuidado. No era para alejarla. Nunca lo sería.
Era solo... para tenerla allí. Sentir que era real. Que de verdad estaba conmigo, a pesar de todo.
"Te amo, Rylan."
El mundo se detuvo.
Mis mús