PARA LA ETERNIDAD.
PARA LA ETERNIDAD.
Cassian entró en la mansión y se sorprendió cuando vio que no solo estaba Leila, también estaban algunas sanadoras y por supuesto Lorcan.
―Te dije que trajeras a Leila.
―Lo hice, pero cuando se enteraron de que la luna de la manada estaba herida, todas quisieron venir, es una buena señal, ¿no crees? ―pregunto con voz divertida.
Cassian abrió su conexión y la preocupación de esas mujeres por Aylin, lo golpeó con fuerza. De hecho, estaban muy felices de tener a Aylin. Rápidamente, les aseguro de que ella estaría bien y les pidió que regresaran a sus lugares.
Las mujeres asintieron y volvieron a su casa.
―Llévala al sofá ―dijo Leila mientras se acercaba con los medicamentos.
Sin embargo, Cassian la ignoró y subió las escaleras y llevó a Aylin a su habitación por segunda vez. Leila y Lorcan se miraron confundidos y Aylin frunció el ceño cuando vio que iban en dirección contraria.
―No es por aquí.
―Lo sé, pero la mía es más cómoda.
―¿Vas a cuidarme personalmente