Me quedé toda la noche esperando su respuesta, pero ella no lo hizo, aun así, allí estaba, frente a su puerta, esperándola, y ya había pasado como media hora de más. ¿dónde estaba? ¿Lo habría olvidado?
Saqué el teléfono del bolsillo trasero de mi pantalón, justo después de marchar su número, y esperé pacientemente a que alguien contestase al otro lado.