POV Dominic
Mis pies me traicionaron.
Automáticamente me llevaron hasta la puerta de su habitación.
¿Para qué? No lo sé.
¿Hablar? ¿Decirle qué?
Solo sé que necesitaba estar con ella. Sentirla cerca. Verla.
Pero la muy cobarde no quiso darme la cara.
Me quedé allí parado como un idiota, preguntándome qué va a pasar ahora.
Y lo peor es que no tengo ni idea. Porque esto que pasó... fue mágico.
Sí, lo sé, suena cursi. Suena más a algo que dirían ellas. Pero es la verdad. Fue increíble.
Y no es que quiera compararla, pero con ella — es locura, fuego, desenfreno. El deseo en su forma más salvaje. Pero con Valentina fue eso y más.
Fue ese fuego que no solo quema... permanece sin importan cuanto deseas apagar.
Fue conexión. Fue sincronía unica.
Como si nuestros cuerpos y deseos hablaran el mismo idioma, al mismo tiempo.
Mierda... ahora sí estoy jodido.
Jodido con todas las letras.
Me metí a la ducha. Dejé que el agua corriera por mi cuerpo, tratando de apagar este incendio mental.
Pero ella