POV Dominic
Si alguien me hubiese dicho lo que encontraría en casa esta noche, simplemente no lo habría creído.
Allí estaba Valentina.
En el mueble de la sala.
Tocándose.
La casa estaba en penumbras, pero la luz tenue de la chimenea iluminaba su silueta. Se veía... espectacular.
Ardiente.
Sensual.
Diosa.
Me acerqué lentamente, casi sin respirar. La escuchaba jadear mientras se acariciaba y no me pude contener.
Salió de mí, sin filtro, sin aviso:
—¿Necesitas ayuda?
Ella me miró, sorprendida al principio. Luego su entresejo se relajaron. No sabía si estaba entendiendo lo que pasaba o simplemente se dejaba llevar.
Me respondió con voz apenas audible:
—Parece que necesito ayuda... Lo tal vez lo tengo todo bajo control.—
—Pero puedes ver si quieres... me solto con su voz jadeante
Pensé que se espantaría. Que se taparía. Que saldría corriendo.
Pero no. Siguió.
Allí, frente a mí, Valentina seguía tocándose, acariciándose, mirándome con esos ojos llenos de deseo.
Verla tan segura. Tan entrega