Alfa Justiniano no podía encontrar las palabras a esa pregunta, sabía la respuesta, pero temía que abrir esa puerta lo conducirían al mismísimo averno. Justiniano intento controlar la conversación, pero Sofía no pensaba quedarse sin respuestas, de sus labios salieron las mismas palabras una y otra vez. Estanislao intentó poner paños fríos, no entendía el pedido de su hermana, pero la sospecha que lo acompaño durante casi la mitad de su vida fue transformada en una triste y angustiante realidad.FlashbackHace casi dos décadas su hermana se había enamorado de un hombre lobo que rompió su alma y espíritu.Sofía era una joven con una fortaleza interna que superaba a la mayoría con su estatus de Alfa, posiblemente si ella hubiera deseado luchar por el liderazgo de la manada “Aullido Lunar” me podría haber superado fácilmente, pero sus sueños eran otro. Cuando era niña tuvo un sueño de conocer a un hombre de temperamento fuerte que podría dominar a su temida loba Senda, que todos la veí
Alfa Justiniano de forma pesada soltó, hice lo que creí correcto en ese momento, su padre debía hacerse cargo de sus errores. Luna ya no pudo contenerse y toda la seguridad que emanaba se desvaneció convirtiéndose en un dolor agudo en su pecho, como una daga directo al corazón de su padre, sus labios gritaron -ELLA NUNCA FUE UN ERROOOOOORRRR- mientras sus rodillas cayeron estrepitosamente obre el piso de madera. Alfa Estanislao se abalanzó sobre ella para evitar su caída, pero ella de alguna forma logro evitarlo, él dolor en los ojos de Sofía cuando era evidente. No entendió porque toda su familia la había traicionado de tal manera, con sus ojos afilados en su hermano espetó – LO PLANEASTE, PARA LOGRAR TOMAR EL MANDO-. Estanislao no podía creer que u hermana pudiera pensar que le había tendido una trampa para evitar que luche por el liderazgo de la manada. Pero de sus labios las explicaciones no se podían explayar por lo que decidió solo preguntar - ¿ como te podemos compensar?-, Sof
Alfa Justiniano se encontraba en un completo estado de shock, por lo que Alfa Estanislao decidió romper el silencio y le pregunto cuales eran los pasos a seguir, si su hermana reapareció era porque su plan de recuperar a la joven se estaba gestando y necesitaba ciertos recursos. Sofía con una sonrisa sardónica – Creo que es momento que demuestres tu estatus de Alfa hermanito, creo que una fiesta estaría bien- Estanislao entendió lo que sindicaba esto, tomo su teléfono y empezó los preparativos, ¿es necesario que invite a todos?. Sofía apretó los puños clavando sus uñas produciendo un dolor que no se comparaba con el intenso que la aquejaba, con una vos firme exclamó -A TODOS-. Los recursos de la manada “Aullido Lunar” eran conocidos, pero durante mucho tiempo la manada había dejado de tener relación de confianza con otras manadas, todo se realizaba de forma administrativa y los festejos que eran parte de la tradición de la manada fueron poco a poco cesando hasta el punto que desde el
Benjamín se derrumbó sobre el gran sofá del despacho, su respiración al principio agitada se fue tornando serena poco a poco. Reynaldo se encontraba ansioso por lo escrito en la segunda carta, pero quería que su amigo fuera el primero en hablar, Benjamín simplemente tiro el cuello hacia atrás en una señal de tomar valor para luego bajar su rostro y clavar los en su mejor amigo, con una sonrisa de dolor mientras las lagrimas corrían como ríos proclamó – Ella esta con vida… pero me esta exigiendo que le regrese a Luna-. Reynaldo estaba confundido, ¿como era que se encontraba con vida? ¿ porque razón nunca se intereso por su hija?. Benjamín sabía lo que estaba pensando Reynaldo, - No sé que fue lo que paso en el pasado , pero de lo que estoy seguro es que es imposible que ella la hubiera dejado ir- el ambiente era denso, los corazones de esos hombres dolían al pensar que por alguna razón le arrancaron a esa pobre mujer a su hija de sus brazos, acto seguido de la respuesta de Benjamín, es
Benjamín se acercó al joven Alfa que permanecía todavía en el suelo, sus heridas no tardarían en sanar, pero su angustia ante la reacción de su padre se reflejaba en su mirada. Beta Benjamín notó la confusión en Alfa Alejandro, le extendió su mano para ayudarlo a reincorporarse mientras con una voz rota decidió que era el momento de sincerarse con él.- Alejandro, esto será muy duro pero te contaré quien es en realidad Luna y la razón por la que tu padre se siente de esta manera-Los ojo de Alejandro parecían salirse de sus orbitas, el Beta Benjamín se estaba refiriendo a él de manera personal, una chispa de esperanza de ser aceptado por quien consideraba su suegro brilló en sus ojos, sin esperar que de su boca saldría el relato más trágico que había escuchado.Benjamín Lo que tengo que contar seguramente hará que pierdas todo tipo de respeto sobre mi persona, si es que lo tienes. La realidad sobre Luna es que no es hija de Lisa, Luna es el resultado de un error del destino, su madre
Alejandro se sentía mareado, esta revelación era demasiado dura, pero seguía escuchando el relato de Beta Benjamín. Era el momento de que todo salga a la luz, y ahora más que nunca iba a luchar por su Luna y curar todas sus heridas del pasado. Benjamín Alejandro se que esto es duro para ti, pero cuando te veo, es lo mismo que ver lo que yo le hice a Sofía. Sabes yo no pretendía que Luna salga nunca de mi casa, no podía darle amor como padre porque fue mi autocastigo, pero en mi egoísmo pensé que no la lastimaba, al contrario creía que la estaba protegiendo de mi. Hice cosas terribles, me encargué de aislarla y dejé que la humillaran públicamente. El día que escapo no fue por que te estaba rechazando, esa noche le prohibí acercarse a ti, siempre fue una niña muy tranquila pero en el momento que puse los limites su loba se descontroló y me atacó, pase varios días buscándola, no podía informarle a nadie que sea de mi extrema confianza porque tu sabes que el ataque equivale a la expul
La noche helada era testigo silencioso del destino que me habían impuesto. De pie frente al altar, sentí la mirada de cientos de ojos clavándose en mi. La tela blanca del vestido pesaba como una sentencia. - Jura lealtad a la manada.Mi madre me miró fijamente, su expresión impasible. Todos esperaban mi respuesta. Aunque la sensación del frío seco, hace que mi cuerpo se erice un poco ya que llevo un ceñido vestido de color blanco con detalles bordados con hilos de oro, entre la trama se mezclan pequeñas perlas con un color nacarado, el vestido es lo suficientemente revelador sin llegar a lo vulgar; claro no fue una elección mía, ese vestido que solo de verlo denota el estatus de la familia a la que pertenece este insignificante maniquí; gracias a la Diosa Luna, le otorgo una exquisita figura y una belleza delicada y simple. Horas antes, cuando trataba de encontrar una forma de escapar, mi madre irrumpío en mi habitación. Su vestido impecable, su porte imponente, su mirada helada.
2- Mírame.Luego de una última mira a la imagen que me devolvía el espejo, le pregunte a Hera ¿lista? ella con la seguridad que la caracterizaba lanzo una carcajada y contesto – Nací lista.Hera es completamente lo opuesto a lo que soy, en realidad le molesta mucho la forma en que la mantengo oculta, ella es orgullosa y cada vez que soy agraviada, su voz resuena en mi cabeza incitándome a dejarla tomar el control y dejar en claro a todo este grupo de pusilánimes, que al más pequeño incidente tiene que correr tras las faldas de su amado Alfa Alejandro, quien en realidad manda. Pero a pesar de ser una loba con aura dominante y de muy mal carácter, ella siempre respeta mi lugar y nunca toma el control por si misma.Después de nuestra pequeña conversación con Hera, tomé una bocana de aire y me decidí a bajar las escaleras de mi hogar. Mientras lo hacía pensaba, cuáles serán las consecuencias de la decisión que terminaba de tomar.Nunca creí ser muy importante o que mi presencia podría mod