Capítulo 9.3: Recuerdo perdido.
Sintiendo la ansiedad de su compañera, Dante quiso decir algo para intentar calmarla, sin embargo, las palabras no lograban abandonar su garganta.
Entre las palabras de Gael, y la sensación de haber estado ahí antes, por primera vez en su vida Dante sentía que no tenía el control sobre nada.
―Dante ―lo llamó Anna en voz queda al notar que sus ojos se habían oscurecido ― ¿Estás bien? ―
―Sí… ―respondió él, aunque su voz sonó tan débil que no logró engañar a nadie
Quedándose sin opciones, Lysander suspiró y se acercó a ellos con paso cauteloso.
― ¿De verdad no recuerdas nada? ―le preguntó a Dante en voz baja, deteniéndose justo al lado de ambos
Desorientado, Dante frunció el ceño. Anna, por su parte, no desvió la mirada de su compañero.
― ¿Recordar qué? ―
―Que hace poco más de un año, tú estuviste aquí… ―respondió Lysander sin rastro alguno de la alegría que lo caracterizaba ―Y muy probablemente, dentro de esa guarida ―
― ¿Qué? ―preguntó Anna mirando al joven brevemente ― Dante, ¿es verd