PUNTO DE VISTA DE Adrián.
No podía quitarme de la cabeza la imagen de Catalinamientras conducía hacia casa. La forma en que había salido de la oficina antes, con ese vestido rojo.
El rojo le quedaba tan bien... Y pensar que se había subido a ese coche, el mismo que la había llevado al trabajo varias veces.
La idea de que estuviera con ese tipo me molestaba, y me moría de ganas de seguirla para ver adónde iban.
¿Estaban saliendo juntos? Los habría seguido, pero recibí una llamada de papá y tuve que volver a casa inmediatamente.
Ni siquiera tenía intención de acercarme tanto a Vera. Solo seguí el juego porque una parte de mí quería poner celosa a Catalina.
Pero cuando vi la mirada en sus ojos, el dolor que intentaba ocultar con tanto esfuerzo, me arrepentí al instante.
Mis pensamientos se aceleraron y no pude evitar sentir una punzada de algo que no quería admitir.
¿Era celos? ¿Frustración? Quizás ambas cosas.
No debería importarme. Ella ya dejó claro su punto de vista.