Elizabeth
—El primer paso siempre lo empiezo yo.—declara firme.—Puedes estar alerta a nuestro entorno. Justo a él lo tengo en carpeta bajo recopilación de datos. Si él intenta hacer algo más que proporcionar a la empresa, no podrá.
Aclaro mi garganta.
—¿Realmente crees tener todo bajo control, Cooper?
Oigo momentáneamente su respiración a través del celular. Logré hacerlo enojar, ya que no contesta solo permanece un silencio tormentoso en la línea. Hacerlo dudar de sí mismo es divertido.
Tome la iniciativa de llamar tan pronto como me preparé. El caso de Zaback me ha dejado ansiosa, el inicio de una duda que no para de corroer en mi cabeza en proximidad al tema de mi madre.
—Ve de inmediato a la empresa, necesito estar al día contigo.—reitera cambiando por completo la conversación.
Imagino lo obstinado que debe encontrarse, no respondió en cuanto a mi pregunta, se limitó a saltarla.
Ruedo los ojos cansada.
—Nos vemos.
Una vez cuelgo, mi guardaespaldas se dedica a posicionar el gps en