Leonardo y su mejor amigo, Andrés, están en un club privado. Se sientan en una mesa apartada, con bebidas en mano, y Leonardo parece pensativo mientras observa su copa.
Andrés: (curioso, notando la actitud de su amigo) ¿Qué te pasa, Leo? Tienes esa cara como si cargaras el mundo en los hombros.
Leonardo: (suspira, girando el vaso entre sus manos) Es que... sí, siento como si el mundo me estuviera aplastando. No te he contado lo último.
Andrés: (levanta una ceja, intrigado) ¿Ahora qué pasa? ¿Tiene que ver con Valeria?
Leonardo: (niega con la cabeza, mirando a su amigo) No, no es solo eso... Es mi familia, la empresa, y la maldita alianza que mi padre ha decidido hacer con los Colmenares.
Andrés: (se sorprende) ¿Colmenares? Pensé que no podían ni verse con esa familia... ¿Qué diablos está pasando?
Leonardo: (con frustración) Sí, lo sé. Se odian, y ahora resulta que las empresas están al borde del colapso. La única solución que encontraron fue unir fuerzas para evitar la quiebra... Y a m