Mundo ficciónIniciar sesiónUn sonido agudo de claxon resonaba a lo lejos. Voces confusas, sirenas tal vez, gente gritando. Todo mezclado… pero nada tenía sentido.
Mi cabeza latía con fuerza, y el cuerpo me dolía como si me hubiera pasado por encima un camión.
Y entonces… como si una luz me atravesara por dentro, recordé.
Larissa. Gabriel. La bomba en el coche.
Me obligué a abrir los ojos, la vista borrosa, pero conseguí enfocar el asiento del copiloto. Estaba vacío.
Chiara… no estaba allí.
El parabrisas estaba completamente hecho añicos… y en medio, un enorme agujero.
No pensé. Con lo







