Dirtsa Aijem
Giorgia Hill siempre ha sido la mujer fea, la rechazada, la burla de todos, especialmente de los hombres, a quienes le parece repugnante por su peso. Vaca, elefante, ballena, han sido los apodos más modestos que le han dado. Sin embargo, nada de eso, ni las burlas ni las ofensas, han podido destruirla, ella se ha mantenido siendo lo que siempre ha querido ser: Una mujer fabulosa. Pero todo eso cambia cuando Julian Lerner aparece en su camino; con su carácter arrogante, su porte altivo y esa sonrisa canalla, sacando lo peor de ella.
A Julian Lerner le encantan las mujeres, eso no se puede negar, pero para él no son más que un entretenimiento. Se acuesta con ellas, se despide y las desecha. La vida no podría ser más sencilla para él. Es atractivo, millonario y uno de los hombres más importantes de la ciudad al tener a su cargo una de las empresas más importantes. Por ello, las mujeres hermosas siempre le han rodeado y ha tenido todas las que ha querido; las más sexys y sensuales. Es por eso que cuando Max, su mejor amigo, le presenta en una cita a ciegas a Giorgia, piensa que le está jugando una muy mala broma, porque esa gorda, como él la llamó, estaba lejos de sus ideales. Pero, de repente, meses después, sus caminos se vuelven a cruzar y en el diario convivir algo cambia. Espera verla más que a nadie. Empieza a notar cada rubor, cada sonrisa, cada cosa que Giorgia hace y que la vuelve la mujer más fabulosa que ha conocido. ¿Por qué si no es el tipo de mujer que le atrae, ha comenzado a desearla de una forma tan ardiente y ha comenzado a sentir un sentimiento que nunca antes había conocido? Celos.