Por Emma
Escuché la voz de Kika, ordenando que fuera a la nueva casa de Pupy, mientras no se explicaba correctamente seguía hablando incoherencias sobre el código de seguridad para entrar.
¿Se había vuelto loca?
-Y si te equivocás al desbloquear el código de seguridad, él va a perder millones.
Yo seguía mirándola en silencio.
- ¿Sos lenta? ¿No entendés?
¿Se drogará?
Juro que lo pensé en serio.
- ¿Por qué tengo que ir a la casa de Pupy?
-Tiene que haber alguien de confianza y sus sirvientes siguen en su antigua casa.
¿Me trata como a una sirvienta? ¿Lo dice ella o él?
Por otro lado, me molestó como Kika decía con desprecio la palabra sirvienta.
En la casa de mis padres teníamos personal de servicio y ni siquiera mi hermano, que a mí me trataba como si yo fuera la que limpiaba los pisos, se dirigía de esa manera a nuestro personal.
Estoy segura de que Kika ni siquiera tenía una mujer que le limpie su casa, todo en ella era una postura y quizás, pensaba que hablando de esa manera y con d