Capítulo 140
Después de primero abordar los asuntos importantes, Camilo lanzó algunas indirectas.

Era bien sabido que Luis y Camilo no se soportaban.

—Tus fuentes son rápidas en trasmitir todo tipo de información y chismes. Empiezo a sospechar que tienes a alguien dentro del Grupo Jurado —dijo Camilo con calma.

—Sigue sospechando —replicó Luis con una sonrisa tensa—. Señorita Marina, tengo hambre. ¿Vamos a comer? ¿Nos acompaña, señor Camilo?

Camilo asintió, sorprendiendo a Luis, que solo había hecho la invitación por cortesía.

Marina envió la dirección del restaurante a Quiles.

Ellos decidieron ir en su propio auto, mientras que ella subió con Luis.

Marina llamó al restaurante para ajustar la reserva.

—¿Por qué habrá decidido Camilo unirse? —preguntó Luis, tras colgar la llamada.

Masticando chicle, lanzó una mirada curiosa a Marina.

—Ni idea —respondió ella con indiferencia.

Luis la miró de reojo, fijándose en su cuello, y sonrió con cierta insinuación.

—Parece que tienes una vida nocturna bastante
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App