Mattheo Morgan
Miró fijamente a Kamila que aun estaba inconsciente en la cama de la habitación. Apenas habíamos llegado anoche le quite el vestido y con la ayuda de Olivie le di un baño quitando algunas manchas de sangre, le puse una pijama y la acosté en la cama para luego pasarme toda la noche vigilando desde cerca.
Hace solo una hora el médico le vino a revisar y asegurar que los bebés estaban bien pero que Kamila necesitaba algo de reposo por estos dos días.
Su cabello castaño claro se esparcía por la almohada de la cama y su respiración era lenta y relajada, me acerco a ella, acarició su mejilla con mis nudillos. Kamila suspira levemente y se remueve. Me acerco a mi vaso de Whisky y bebo un poco de su contenido antes de fijarme en Kamila nuevamente.
El tono de llamada de mi celular rompió el silencio de la habitación, me acerco a él y lo tomo descolgando la llamada.
—¿Si?—me acerco a una de las ventanas de la habitación
—Tenemos un problema—dice Chris al otro lado de la línea
—¿C