Capítulo 7.
Su mirada se posó en mí rápidamente. Yo continué antes de perder valor.
- Quiero decir, si lo único que necesito para que me apruebe es saber defender físicamente a mi manada, yo podría aprender.
Me miró por un largo rato.
Quizá me vió muy decidida porque finalmente asintió.
-Te daré la oportunidad por un periodo de prueba. Ahora mismo no puedo entrenarte personalmente, así que dejaré que un Alfa provisional se encargue de la manada y de que comience tu instrucción. Tengo que encargarme de los sobrevivientes de las manadas del Sur, por lo que regresaré a ponerte a prueba en tres meses. Si logras demostrar que tienes lo que se necesita, dejaré que seas una Luna sin Alfa hasta que decidas emparejarte... o no.
Le di una brillante sonrisa.
-Muchas gracias por la oportunidad.
-No seré suave, así que espero te lo tomes en serio.
Sin más me dejó volver con todos en la Casa de la manada.
Había sido una noche y madrugada... agotadoras. Mandé a todos a dormir mientras los Supremos y