Esto era lo que más intrigado me tenía, quizás tuve roces con personas, pero estas no se encontraban envueltas en algo tan turbio. Al final mis negocios no me acarreaban enemigos que se movieran por el bajo mundo.

—Supongo que tengo que investigar quién dió la orden para que esto sucediera, no puedo estar teniendo este tipo de problemas en la mansión y menos poniendo en riesgo a ti o a Sofía.

—¡No! No hagas esto —la desesperación en los ojos de Rocío fue muy grande —. No quiero que te pase algo, entiende que a veces es mejor ignorar ciertas cosas.

Rocío se mostraba totalmente desesperada, pensé por un momento en un nuevo ataque de ansiedad, así que la tomé de los hombros y la miré directamente.

—Está bien, no voy a investigar nada. Pero creo que es necesario cambiar el personal de seguridad, ellos no han sido muy efectivos, que digamos.

—Está bien —ella suspiró con un alivio muy grande —, pero por favor no vayas a investigar, suficientes investigaciones hemos tenido durante todo este