Elizabeth se quedó mirando a su esposo intentando comprender el sentido de lo que le estaba diciendo.
Los dos se mantuvieron en silencio mientras él esperaba, con una expresión de tristeza, la respuesta que ella iba a darle.
—¿Escuchaste la conversación? Me estás diciendo que no fuiste a traer el botiquín que te pedí y te quedaste tras la puerta escuchando —preguntó para estar segura.
Su esposo asintió con la cabeza, cada vez parecía más avergonzado y culpable.
—No quería dejarte sola con Anderson y le pedí a Rosaur… Rosmari que fuera ella mientras yo me quedaba ahí para cuidarte. Te juro que mi intención fue cuidarte no espiar, pero me salió caro hacerlo.
Elizabeth frunció el ceño y continuó preguntando.
—¿Por eso desapareciste sin dejar un recado, sin decir a dónde ibas y dejándome preocupada? —Roger asintió con la cabeza, parecía no querer pronunciar palabras para no estropearlo más, pero terminó por decir:
—Pero sí dejé un recado con mi asistente, solo parece que esa mujer no es c