Samanta
Observé nuevamente el documento vacío que se titulaba “Ensayo sobre la educación actual”. Comencé a escribir ideas sueltas, para tener una base y después poder explayarme sobre ellas. Los ensayos no eran mi fuerte, pero Samuel me había dado unos muy buenos consejos para poder hacer el trabajo con éxito.
Alcé la mirada y noté cómo mi amigo escribía de manera fluida en su computador.
<>, pensé.
Ojalá pudiera sentirme tan tranquila respecto a este trabajo.
Estaba en mi casa, con Samuel, cada uno trabajando en su ensayo. Habíamos quedado en juntarnos en mi cafetería favorita, pero mi hermana había salido temprano del colegio y no podía dejarla sola, por lo que invité a Samuel a venir a mi casa a trabajar juntos.
Emilia se enamoró de mi amigo con solo verlo entrar por la puerta principal, y desde ese momento no se despegó de él.
—¿Por qué escribes todo con color negro? —preguntó Emilia de pie sobre su silla para poder ver lo que él hacía en su computador. Samuel se giró a observar