Capítulo 69 Manipulación
El silencio fue ensordecedor. La pregunta de Luca colgaba en el aire, cargada de una intimidad que Eleonor no estaba segura de poder manejar. Su mente, antes nublada por el deseo, ahora se aclaraba con la cruda realidad de su situación y la de su familia.
Luca, percibiendo su recelo, continuó con voz suave.
—No me respondas en este momento si no quieres. Ahora hablemos de algo más. ¿Sigues empeñada en hacerte cargo de la textilera?
—Por supuesto. No hay nadie más —respondió Eleonor, volviendo a su postura defensiva, la vulnerabilidad de segundos antes reemplazada por una férrea determinación.
—No dudo de tu capacidad —afirmó Luca, su tono firme y decidido—. Lo que quiero es que te dejes ayudar. Te ayudaré, lo quieras o no —le advirtió.
Eleonor se levantó de la cama, así desnuda como estaba, y tomó una toalla de una de las gavetas del closet. Se envolvió en ella con un gesto brusco, como si la tela pudiera protegerla no solo del frío, sino de la intensidad de