Gavin soltó una carcajada.

—Sí, señora Maxwell, fue el señor Maxwell quien me pidió que la invitara a pasar.

Aunque Marcus solo había aceptado la propuesta de Gavin, fue el propio Gavin quien dijo que el señor Maxwell la había invitado.

Rubí quedó atónita y lo miró con sorpresa.

—¿En serio?

Entonces se dio cuenta de que, ¿cómo podría Marcus haber tomado la iniciativa de pedirle a Gavin que la invitara? Probablemente solo era Gavin tratando de consolarla.

Rubí suspiró y no dijo nada más. Solo asintió y le dijo:

—Ya lo tengo. Vamos, Gavin.

Gavin rápidamente abrió la puerta del auto y dijo con una sonrisa:

—Señora Maxwell, después de usted.

Rubí asintió y, mientras caminaban, le preguntó por Dylan y si Marcus había comido.

—Dylan apenas probó un par de cucharadas de sopa —respondió Gavin—. El señor Maxwell comió algunos bocados, pero la comida estaba fría, así que tampoco comió más.

—Hmm, ya veo —dijo Rubí.

Estaba a punto de agregar algo más, pero Gavin se adelantó:

—El señor Maxwell me