Siento cómo Drack me atrae hacia él y no me opongo. Descubrir que Naty es una bruja me ha dejado en shock, y saber que su amor por los portales, las dimensiones, el tiempo y el espacio proviene de su verdadero origen me ha dejado sin habla. Así que acepto refugiarme en los brazos de Drack, que, aunque sigue siendo un extraño para mí y la lógica dice que me aleje, me siento segura a su lado. Anhelo seguir sintiendo su toque, y sentarme en sus piernas se siente como lo más normal y cómodo del mundo.

"Si Naty es una bruja, ¿cómo terminó en un orfanato? ¿Es de este mundo o de otro?". La pregunta escapó de mis labios antes de que pudiera contenerme. El sabio, quien acababa de revelarme el enigmático origen de mi amiga, me dirigió una mirada que pareció atravesar hasta los pensamientos más recónditos de mi alma, erizándome la piel.

"Hace años". Comenzó a hablar el sabio con un tono de voz grave.

"Una masacre tiñó de sangre la aldea real de los brujos. Sus reyes fueron traicionados por aquellos que anhelaban el poder. Para proteger a su heredera, la reina abrió un portal, enviando a la princesa a través de él". Hizo una pausa, el peso de sus palabras llenando el aire.

"Una vez controlada la amenaza, buscaron a su hija, pero el portal pareció habérsela tragado. Ni siquiera su inmenso poder les permitió encontrarla".

El sabio continuó aumentando la sopresa en mi.

"El oráculo reveló la verdad: la princesa, poseedora de un maná mágico extraordinario, al sentir el peligro inminente, despertó su poder y se autoselló, a sí misma y al planeta donde su madre la había dejado. Esto evitó que sus enemigos la aniquilaran, pero también impidió que sus padres la hallaran". Su mirada se fijó en mí.

"Aunque han pasado casi tres décadas, sus padres no se rinden. Siguen buscándola". Jadeé, la sorpresa abrumadora. A diferencia de mí, mi amiga tiene padres que la buscan con una persistencia inquebrantable. Eso habla de su amor hacia ella. Ahora, más que nunca, sienti la urgencia de encontrarla.

"¿Entonces mi amiga es una princesa?". Pregunté, buscando confirmar lo que ya se.

"Sí, tu amiga es la heredera del reino de los brujos. Es hija única; los reyes se han negado a tener más hijos mientras su princesa no aparezca. Nunca han perdido la esperanza de encontrarla y, al hacerlo, no quieren que se sienta desplazada. Por eso no han tenido más hijos." Asentí, tragando saliva ante las palabras del sabio.

Ahora comprendo la inexplicable búsqueda de mi amiga por sus orígenes. Aunque su verdadero ser este sellado en su interior, ella sabe que tiene una familia que la ama y un hogar al que volver. Esto me estrujó el corazón; no puedo imaginar el sufrimiento de todos estos años separados. De alguna manera, ellos sienten que su hija sigue viva, mientras que mi amiga, en el fondo, sabe que tiene unos padres que la aman.

__"No hay forma de traerla hasta aquí." Inquirí al sabio, pero él negó con la cabeza.

"Solo la princesa puede abrir el portal o desbloquear el sello, y ella ni siquiera lo sabe. Solo queda esperar a que descubra cómo controlar sus poderes; entonces, vendrá a buscarte. Es perseverante y presiento que no se rendirá hasta encontrarte." Asentí, una mezcla de frustración y decepción instalándose en mí. Deseo traer a mi amiga lo antes posible para que se reencuentre con sus padres. Pero, al parecer, solo ella puede abrir el portal que la traerá o desbloquear el sello que protege a la tierra y, así, permitir que la vayan a buscar.

"Comprendo. Creo que por hoy es suficiente información. Me gustaría intentar descansar, y mañana, con la mente más clara, podemos hablar de nuevo si hay algo más que deba decirme. De todas formas, la única que puede llevarme de vuelta a mi planeta es mi amiga, y ella ni siquiera sabe que tiene ese poder." Le hablé al sabio, quien asintió. Me puse de pie y Drack me siguió, sujetándome con una delicadeza en la cintura que me llegó al corazón. Es como si temiera que me cayera, y su preocupación y cuidado me conmovieron. Mi corazón, herido por el sufrimiento del pasado, se resiste a creer que un hombre tan aparentemente maravilloso se haya fijado en mí.

"Gracias, Lyon, te dejamos. Mi luna quiere descansar, así que la llevaré a mi cueva. Si tienes más información sobre su amiga o cómo abrir el portal, infórmame para traer a mi luna a verte." La voz grave de Drack me estremeció, resonando tan cerca de mi cuerpo.

La idea de ser llevada a su "cueva" se confirmó al observar mi entorno: estamos, de hecho, dentro de una cueva. Me golpeé mentalmente por mi despiste; tan absorta estaba en las palabras del sabio que no había prestado atención. Aquí, en este planeta, las cosas parecen estar muy desactualizadas, ¡viven como cavernícolas! Eso me asustó, recordando las últimas veces que estuve en una cueva: una me llevó a un portal y en otra, un oso casi me devora.

El sabio asintió a las palabras de Drack. Después de despedirnos, Drack me tomó de la mano para guiarme. La noche ya ha llegado, y la ausencia de luces me deja completamente a ciegas; sin embargo, él parece tener una visión superior en la oscuridad. Solo con la luz de la luna le basta para orientarse. Así, me condujo de vuelta al lugar donde nos detuvimos después de bajar la montaña y nos encontramos con el sabio, que resultó ser la entrada de una gran cueva con una tenue iluminación en su interior.

"Sé que esto es nuevo para ti, mi luna, y que vienes de un mundo diferente al nuestro". Dijo Drack, su voz es como un calmante que se lleva todas mis preocupaciones.

"Pero quiero que sepas que jamás te haría daño. En mi territorio estarás a salvo. Hay lobos patrullando día y noche, y en mi cueva podrás descansar. Si te sientes más segura sola, me quedaré en la entrada, cuidando tus sueños". Sus palabras lograron calmar mi asustado corazón. Me derritió saber que se preocupa por mi seguridad y comodidad; la perfección y dedicación en cada una de sus acciones están haciendo que mis barreras se empiecen a debilitar.