Capitulo 2

¿Otro duelo de miradas? ¡Por favor no! soy pésima en eso.

—Escúchame —arrastré la silla hacia él, haciéndo que rechinara contra el suelo— Nuestro antiguo trato... bueno, no tan antiguo, porque lo hicimos hace como diez minutos, así que no es tan antiguo... entonces sería nuestro trato de hace diez minutos o más bien...—me quedé pensando en lo que diría, hasta que cerré la boca al notar como me miraba fijamente, con evidente fastidio.

—¿Puedes ir de una vez al grano? — preguntó, mirando su reloj en su muñeca— tenemos clase de química en quince minutos.

Rodé los ojos.

—Bien, lo que quiero decir es que, si tú me ayudas a aprobar todas las materias con una nota aceptable, —hice una mueca, sintiéndome un poco ridícula—, yo tal vez... —atrapé mi labio inferior con los dientes, dudando un segundo— te ayudaré a conquistar a la "boba esa", Elizabeth.

Él parpadeó varias veces, incrédulo.

—¿Es en serio?

—Sipi —respondí con una sonrisa traviesa.

—¿Por qué lo harías?

Me encogí de hombros

—Me gusta ver como las personas fastidian sus propias vidas. Es divertido.

Jeremy se quedó en silencio, lo pensó un par de minutos y finalmente asintió a regañadientes.

—Bien, acepto el trato. Espero que cumplas tu parte. Entonces... ¿en tu casa mañana a las cuatro de la tarde? —Preguntó mientras se levantaba, recogiendo su libro y guardandolo en su mochila

—Claro —me puse de pie también—. Ah, dame tu teléfono.

—¿Para qué quieres mi teléfono ?

¡Ay, que preguntón!

—¡Qué me lo des, carajo! —lo interrumpí, alzando un poco la voz, ganándome algunas miradas curiosas y murmullos de los estudiantes alrededor.

Él suspiró, metió la mano en el bolsillo delantero de su pantalón y sacó su teléfono. Me lo tendió con desgana. Lo tomé y lo desbloqueé con rapidez, ya que no tenía contraseña, marqué mi número y colgué cuando sonó en mi bolsillo.

Tome mi teléfono, abrí el registro de llamadas y ví la llamada perdida del número desconocido. Le dí "agregar contactos" y lo guardé con el nombre de Nerd.

Escribí un mensaje rápido con la dirección de mi casa, lo envíe y guardé mi teléfono antes de devolverle el suyo.

—Bueno, entonces nos vemos mañana —dije. Ambos nos levantamos y empezamos a caminar hacia la salida— Adiós. —me despedí de él aunque nos tocaba la misma clase.

—Adiós, chica —murmuró él, apenas audible.

Lo vi desaparecer por el pasillo y suspiré. Caminé hacia el patio trasero del instituto, buscando un poco de sombra bajo un árbol. Saqué un cigarrillo, lo encendí y le dí una larga calada. El humo elevándose mientras exhalaba con pesadez.

—Esta chica pronto tendrá un auto nuevo —hablé para mi misma en voz baja—, y, si tengo suerte, aprobaré el año y me graduaré con buenas notas... o probablemente termine trabajando en una tienda de pescados.

Solté una risita cansada.

—Sí, ya me vi, esta misma tarde compraré un delantal con estampado de peces. — murmuré, dejando que el humo se escapara entre mis labios.

Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP