DEREK
Ha pasado más de una semana y mi vida ha dado un giro extraño. Milena está demasiado diferente… no físicamente, sino en su manera de actuar. Está más tierna, demasiado apegada a los niños y a mí, como si quisiera aprovechar cada segundo. Y eso, en vez de darme tranquilidad, me genera un malestar en el pecho, un miedo irracional de perderla.
Intento concentrarme en los escritos de una de las autoras nuevas que ingresó estos días a la editorial. Tiene un talento especial, una capacidad intelectual que la hace brillar entre las demás; no es cualquier novata. Suspiro, cerrando el archivo del último capítulo que acabo de enumerar. Sé que tengo que hablar con Laura sobre lo ocurrido aquella vez. No puedo permitir que las cosas queden así, menos que ella siga comportándose como si nada. No voy a negar que estuve con ella, que hubo un instante en el que la pasé bien, pero fue un refugio vacío, nada más. No amor. El único amor que conozco ahora y reconozco es el que siento por Milena. Lo