Capítulo 81: Una pequeña muy lista.
Finalmente, Andrew asintió, resignado, pero determinado. Sabía que no podía negarse a la petición de Claudia, no cuando ambos compartían el mismo anhelo desesperado de encontrar a su hijo perdido.
—Está bien —murmuró, su voz apenas un susurro cargado de angustia y decisión—. Lo haremos. Pero debemos ser extremadamente cuidadosos, no podemos permitirnos cometer errores.
Claudia asintió con gratitud, comprendiendo la magnitud de lo que estaban a punto de hacer. Se acercó a Andrew y lo abrazó con fuerza, buscando consuelo y fortaleza en su apoyo mutuo.
—Gracias, Andrew. Sé que es arriesgado, pero es nuestra única opción —dijo con voz temblorosa, su corazón latiendo con una mezcla de esperanza y miedo.
Andrew la sostuvo con ternura, prometiendo que todo estaría bien.
—Lo sé, Claudia. Haremos lo que sea necesario para encontrar a nuestro hijo, sin importar los riesgos.
Caminaron hacia donde estaba la pequeña, con su corazón lleno de esperanza y una determinación en sus miradas. Listos para