Capítulo 66. Un Lancer ha muerto.
Existen noticias que te pueden cambiar la vida para siempre, y en el caso de Fernando no fue la excepción. Él nunca olvidaría la llamada que recibió esa calurosa mañana. Eso marcó un antes y un después en su vida.
El teléfono de Fernando vibraba y vibraba sobre la pequeña mesita de noche mientras él estaba debajo de la regadera recibiendo esa agua fría en todo su cuerpo.
Cuando salió del baño se encontró con algo muy extraño en la pantalla de su teléfono. Félix no solía llamar a nadie. Era una situación increíble ver una llamada suya en tu teléfono, pero esa mañana había 8 llamadas de Félix en el teléfono de Fernando. De inmediato supo que algo muy malo había pasado.
Fernando tenía el teléfono en la mano cuando una nueva llamada de Félix llegó y la atendió sin perder un segundo.
—¿Félix? ¿Estás bien? ¿Pasó algo?
—Fernando... Será mejor que te sientes—, sugirió Félix.
—¡Déjate de estupideces y dime de una maldita vez qué pasó!—, reclamó Fernando porque no podía soportar la incerti