Pego un respingo en lo que escucho su voz detrás de mí. Giro la cara sobre mi hombro y lo veo aproximarse a la mesa. ¿Bajó a comer con nosotros?
—Por lo visto, han estado conociéndose mejor durante mi ausencia —su mirada feroz me obliga a soltar la mano de su amigo—. Qué bueno que haya decidido bajar y venir a acompañarlos, ahora que todos estamos viviendo juntos, es bueno comenzar a estrechar los lazos familiares. ¿No lo creen?
No pasa desapercibido la ironía con la que lo ha mencionado. Decido ignorar su falta de tacto y el doble sentido oculto detrás de sus inoportunas palabras. Sin embargo, Wil no está dispuesto a dejarlo pasar.
—¿Ahora usamos la ironía como forma de comunicación entre nosotros, Tony? ―inquiere su amigo con sarcasmo—. Te hacía un hombre con más clase, pero fuiste burdo y ordinario. Nada propio de ti. ¿Por qué mejor no hablas claro y me lo dices a la cara?
Anthony se sienta a la cabecera de la mesa, lugar que siempre ha ocupado. El momento es tenso e incómodo. No q