Ava vio aquella escena tan conmovedora apenas cruzó la puerta. Tras un leve instante de desconcierto, le indicó a la sirvienta que colocara las cosas que traía sobre la mesa.
Sonrió a los pequeños y dijo con dulzura:—Cariños, la abuela ha venido a verlos otra vez. Hoy les traje unos regalos especia