Después del traslado, estamos felices; todos los lobos se han recuperado. Amón, como dios de la creación, ha recreado nuestro hábitat, pero es invisible para los ojos de los extraños. Tenemos órdenes de mantenernos siempre en nuestra forma humana. No podemos aullar en las afueras; debemos hacerlo en lo profundo del templo. Hemos decidido aumentar nuestras energías y poderes conectándonos con nuestros ancestros. También los antiguos han decidido que todos los jóvenes vean de primera mano dónde vivíamos.
Hoy visitaremos el Templo de Kom Ombo, en la ribera del río Nilo. Es donde vivían los antepasados de Amet. El dios Sobek, con cabeza de cocodrilo, estaba íntimamente relacionado con este lugar. Antiguamente llamada Nubt, que significa "ciudad de oro", esta región tenía una importancia especial. Mi padre era hermano del faraón, el beta del