08. NO TE QUIERO EN MIS TIERRAS
BLAIR
Corrí hacia la entrada pensando que podía ser otro ataque de esos lobos.
Antes de tocar el picaporte, la puerta se abrió de golpe y entró Cassidy.
—Ay, por la Diosa, qué susto —confesé, llevándome la mano al pecho.
Estaba hasta temblando.
Cassidy cerró de un portazo y miró ansiosa el desastre en la sala.
—Algo le sucedió a esa humana y tiene que ver contigo, ¿verdad? —me preguntó con cara seria.
—Sí, anoche esos lobos me atacaron.
Terminé por contarle todo mientras me entretenía recogiendo los destrozos.
—Déjalo todo Blair… —me haló del brazo y las cosas se me cayeron de las manos.
—¿Qué?... o sea, lo pensé, pero Cassidy, no tengo ni comida en la nevera. ¿A dónde diablos me voy a ir sin un duro?
No es que no quiera, de verdad, pero tendría que dormir en la calle tapándome con cartones… de nuevo.
—Venía a darte una noticia. No tengo opción. No quería dejarte sola…
Comenzó a pasearse por la sala.
La conozco demasiado.
Lo único que la pone así de angustiada… es su familia.
—Tengo q