Mundo ficciónIniciar sesiónGabriel ya no podía soportarlo más. Sentía que la presencia de Alex Ruiz se había convertido en una sombra que lo seguía a todas partes, incluso cuando intentaba concentrarse en el trabajo o disfrutar de una tarde tranquila junto a Isabella. Todo lo que alguna vez le pareció un gesto profesional o una coincidencia comenzó a teñirse de sospecha. Las casualidades se volvieron incómodas, los encuentros inoportunos se repitieron demasiado. Y aquella escena en la oficina de su esposa había sido la gota que colmó el vaso.
Esa mañana, Gabriel llegó a la oficina de Fuentes Global con una decisión tomada. No iba a permitir que Alex siguiera formando parte del proyecto San







