El día que el doctor William le dio el alta a Cristofer, fuimos a recogerle a la clínica James, mi hija que estaba toda nerviosa y yo, en el coche de mi cuñado. Bajamos del coche cuando llegamos, bajando mi hija sin dejar de reir, cogiendo mi mano para acercarnos a la clínica, fuimos hacia los ascensores para subir a la planta, colocandose mi pequeña delante de James y de mi, notando como mi cuñado, acariciaba mi pierna hasta rozar la tira de mi tanga. Me quedé mirándolo muy seria, poniendo sus dedos en mi barbilla, acercando sus labios a los míos, me eche hacia delante cogiéndole a mi hija la mano, viendo la pícara sonrisa de James en sus labios.Una vez que bajamos del ascensor, nos acercamos a la puerta y abrimos la puerta de la habitación, sintiendo un pellizco en mi estomago al ver la escena de mi hija con su padre, ya que se fue corriendo hacia él llorando, mientras se abrazaban, besando Cristofer a su hija
—- Ya mi amor, no llores mas, papa se va a casa contigo y con mamá, ya pa