Cristofer no apartaba su mirada de mi mirada, sus preciosos ojos verdes me hipnotizaba cada vez que me miraba ya que aun después de todo ese hombre seguía siendo el amor de mi vida y el padre de mis hijos, ¿cómo podría castigarlo? aunque fui humillada, violada y acosada, le amaba y no podía apartar mis ojos de él
— Dorothy ¿me puedes dejar un momento a solas con Noelia? — escuche de sus labios como si deseara rogar algo
— No Cristofer, quiero escucharte pedir perdon a una mujer que te ama y es la madre de tus hijos, a pesar de todo lo que tu y tu querido hermano le habeis echo sufrir sin sentido ninguno — le dijo su abuela
—- Esta bien como desees, Noelia sabes que eres todo en mi vida, los celos me han cegado y no merecias que te tratara asi, aqui delante de todos los asistentes, te ruego que me perdones y aceptes a este imbécil de nuevo en tu vida —- me dijo
— Ahora que te he escuchado pedir perdón, os dejaré solos cinco minutos Cristofer, si mi nieta sale sola de esta sala, no vue