Natalie frunció los labios, -Sí.
Tina suspiró y dijo lentamente: -¿Aún te gusta?
Natalie no dijo nada, pero Tina vio que su agarre al volante se tensaba y comprendió al instante.
-Natalie, si todavía te gusta Leonardo, creo que puedes darle otra oportunidad. Te mintió sobre lo de Bryan, pero tenía miedo de perderte, y creo que te quiere de verdad.
Natalie la miró y enarcó una ceja, -Dijiste que era un cabrón el otro día, ¿por qué ese repentino cambio de actitud?
-Pensé que te había traicionado, pero después de investigar, me enteré de que sólo estaba con Pilar para darte celos, y nunca tocó a Pilar. Me sorprendió que un hombre tan orgulloso como él quisiera someterse a ti.
Natalie sonrió y dijo despacio: -Sí que se sometía por mí, pero no olvides que también me engañó muchas veces. Necesito una pareja normal, no un maniático con delirios de control sobre mi vida.
Tina sonrió, -¿Sabes cuántas mujeres querrían ser tratadas así por Leonardo? Cualquier mujer se perdería en la felicidad si