—¡Abuelo, no puedes hacerme esto! Soy tu nieto.
Andrés bajó la mirada
—¡Solo vete! —exclamó con fuerza y rabia.
Llamaron a la puerta y un guardia entró
Marcus sonrió al ver que su sobrino por fin recibía su buen merecido, luego del daño que les había causado.
—Escolten a este hombre hasta la salida de la empresa —exigió Marcus
Álvaro sintió que lo tomaban con fuerza del brazo y era sacado, gritó, berreó y pataleó, mas nada pudo hacer, al final fue echado del lugar.
Pilar abrió ojos enormes al darse cuenta de lo que ocurría, fue hasta la sala de juntas y cuando vio ahí a Marcus Ford, casi se desmaya
—¿Estás bien, Pilar?
—¡Marcus, estás vivo! Marcus… —ella se abalanzó a sus brazos, sollozando como una niña
Marcus se sintió incómodo y Andrés los miró con extrañeza.
Él tenía un objetivo claro, y era despedir a Pilar, luego de confesarle su amor, Marcus tenía claro que ella no podía seguir a su lado, y que generara algún problema con Evana.
Mansión Ford.
Sabrina se despidió