Luciana asintió.
Cuando Olivia se fue, Luciana se quedó sentada en el sillón, perdida en sus pensamientos.
Bzzz...
El celular vibró.
Lo sacó y vio un mensaje de Sebastián:
"¿Cuándo regresas?"
Se quedó viendo la pantalla un buen rato.
Al final respondió:
"En la tarde."
Después de eso, Sebastián no escribió más.
Deslizó el dedo por la pantalla y se dio cuenta de que tenía una conversación larguísima con él sin notarlo.
—Ya está la comida.
Como media hora después, Olivia volvió.
Luciana se levantó y fue al baño.
El esposo de Estela había comprado un montón de cosas y Estela cocinó varios platos ricos.
Mientras comían, Estela no paraba de preguntarle cosas a Luciana, preocupada.
Luciana le aseguró que Ramiro estaba bien.
Con eso, Estela por fin se calmó.
Después de comer, Luciana se fue en su auto.
Estacionó y caminó hacia el bufete. Cuando estaba esperando el ascensor, Sebastián entró y pasó junto a ella. Le agarró la muñeca y la jaló hacia las escaleras.
Las luces de emergencia se prendi