Capítulo 65

No sé por cuánto dormí pero al despertar me encontré con la mirada de David. Él me sonrió al verme abrir los ojos y le devolví la sonrisa. Estaba segura que no lo vería aquí al despertar pero me alegra que se haya quedado, cuándo visualicé la habitación, no había más nadie. Ni Franco ni mi padrino. Creo que David notó mi tristeza al no ver a ninguno de ellos de acá y me dijo: 

-Tu padrino sigue ocupado, me llamó hace cinco minutos -me sonríe y continua-. Franco está en el apartamento de tu tía buscando ropa para cambiarte. La doctora ha venido hace diez o quince minutos y nos ha dicho que ya podemos llevarte a casa. 

-¿En serio? ¿Ya puedo irme a casa? -mi felicidad no podía ocultarla. De verdad quiero irme a casa. 

-Sí cariño -me responde casi con la misma felicidad. No podía ocultar que aún seguía enojado con la noticia que recibió-. Ya podemos llevarte a casa. -me coloco un mechón de pelo detrás de la oreja y me pregunta-: Entonces, ¿a qué ca

Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP