Punto de vista en Tercera Persona
El Alfa Levi estaba sentado en su escritorio cuando sonó su teléfono. No necesitaba mirar la identificación de llamadas para ver quién estaba llamando. Agarró el teléfono y presionó el botón "hablar", presionándolo contra su oído.
—Más vale que tenga buenas noticias —dijo, su tono más áspero de lo previsto.
—No me siento bien sobre esto... —dijo la voz del otro lado—. ¿Qué pasa si la cago? ¿Qué pasa si me delato?
—No lo harás —dijo Levi, su tono volviéndose aún más agrio—. Porque si lo haces, enviaré a alguien para completar este trabajo y no te gustará tu castigo si tengo que hacer eso.
Hubo silencio del otro lado durante un largo rato.
—Te mantendré actualizado sobre mi progreso. Pero podría tomar un tiempo...
—Espero un reporte para el final de la semana. No me decepciones —gruñó Levi y sin otra palabra, terminó la llamada, golpeando su teléfono en su escritorio, casi rompiéndolo. No sería la primera vez que rompía un teléfono; su Beta Ron tendría q