Yei :D uno de mis capitulos que mas me gusto escribir
Recogía mis pertenencias de mi habitación, por petición de mi madre me pidió que fuese un tiempo a Suiza para intentar pensar que hacer. Además, una empresa suiza me propuso realizar una pasantía remunerada con una oferta mucho más competitiva que la de Rusia. Colocaba varias de mis bufandas en mi maleta cuando un toque en mi puerta me hizo elevar el rostro, era Dimitrik.—¿De verdad tienes que marcharte, Krolik(conejita)?Sonreia ligeramente. Dimitrik había empezado a sentirse más cómodo al venir a verme con mayor frecuencia a pesar de que mi padre aun le decia mafioso criminal, que no me dejaria con el. Tambien, a pesar de que todavía tenía dificultades para caminar, los especialistas afirmaban que solo eran efectos residuales y que pronto habría una mejoría. Consideraban que era un caso excepcional, ya que logró dar sus primeros pasos antes de cumplir un año.—Solo serán unos meses. —No me gustan las relaciones a distancia.Al oírlo, esbocé una sutil sonrisa con mis labios. —¿Lo d
Hacía aproximadamente un año desde que Dimitrik había asumido el cargo de mi jefe. Mi padre no aceptaba que fuese mi novio, fue tanto así que el se lo llevaba día tras días a demostrarle que no era el hombre de mi vida. ¿A dónde? Iban a los campos de paintball para “demostrar” porque no debería ser mi novio. De acuerdo a lo que mi padre decía, eso solo tenía como propósito mostrarle lo que le aguardaba si intentaba contraer matrimonio conmigo. Aunque solía llegar desanimado, un día apareció con una gran sonrisa que contagiaba a todos a su alrededor. Mi cumpleaños estaba cerca, así que Dimitrik organizó un viaje a Lofoten, un archipiélago suizo. Las zonas montañosas ofrecían un paisaje impresionante, sin embargo, lo más emocionante estaba reservado para la noche. La oscuridad ejercía un poder de atracción, al igual que nuestras almas. Una brisa fresca acariciaba mis pulmones. Mientras contemplábamos el precioso paisaje, sujetaba la mano de Dimitrik. Avanzábamos, envueltos en nuest
Se filtraba la luz, brindando la bienvenida a lo que en pocos minutos sería mi nueva vida. Pronto…muy pronto seria la señora Rudakov… Mi vestido corto colgaba con elegancia por delante, mientras que su cola larga se extendía como una catedral por detrás. Largo por detrás, corto por delante, dando una contradicción de lo que yo era….un rostro angelical que podría aniquilar a quien sea en cuestión de segundos. El encaje del vestido presentaba preciosas ornamentaciones florales que se fusionaban a la perfección con las deslumbrantes piedras incrustadas. Un leve golpe en la puerta me hizo voltear, mi madre estaba allí. Con una sonrisa radiante, era evidente que ella rebosaba de emoción. —¿Estás preparada para ponértelo? —Asi es mamá. —Contestaba con gran entusiasmo. Con la asistencia que me brindaba, me ponía el vestido y lo abrochaba en la parte posterior. Con una sonrisa única, experimentaba la suave tela translúcida de las mangas largas y no pude evitar sentirme como la mujer más b
Dimitrik me guiaba hacia el salón de celebraciones del hotel para la fiesta que íbamos a tener. Una preciosa alfombra floral recibía a la decoración de cristales colgantes en forma de lágrimas. Me encantaba la sofisticación y elegancia que cada mesa exhibía con sus juegos de mesa en cristal y rodeada de flores. Las sillas estaban rodeadas por una tela que combinaba con la decoración que teníamos.Con suavidad, Dimitrik me conducía hacia donde pude apreciar una preciosa escultura que nos representaba a ambos, con la elegante inscripción que decía Señor y Señora Rudakov. Una persona comunicaba nuestra llegada a medida que nos acercábamos, indicando a los presentes que íbamos a realizar nuestra primera danza nupcial. Guiado por la canción "Al lof me", Dimitrik me conducía con una destreza casi encantadora. Aunque había completado sus sesiones de terapia, en ocasiones daba algunos pasos con cierta cojera, sin embargo, no nos preocupaba. Bailábamos al compás de la música, en ese momento éra
—Señora ya le he dicho previamente de que no es posible proporcionar detalles sobre la presencia de su esposo en el hotel. —El joven explicó con calma— esa información es confidencial y debe respetarse la privacidad del cliente. El ruido que producía el chico al teclear en su ordenador era una distracción ideal que alimentaba mi enojo. La manera tan ineficaz con la que me ignoraba me hacía plantearme si eso era parte de su protocolo en su empresa. Seguía concentrado en la pantalla de la computadora, como si estuviera familiarizado con este tipo de situaciones. Llevaba unas uñas acrílicas las cuales hacian un estrepitoso sonido de tamboreo mientras toqueteaba en el escritorio de madera. Había arribado rápidamente al hotel de dos estrellas en California. ¿Cómo descubrí la presencia de mi esposo allí? De manera sencilla, coloqué un dispositivo de rastreo en su vehículo cuando este empezó a tener un comportamiento muy inusual hacia mí. Durante tres años de matrimonio, tuve que sacar
Después de medio año, viví seis meses intensos en los que mi expareja, quien solicitó me divorcio estando en prisión. El y su amante me denunciaron por diferente crímenes haciendo que cumpliera por más tiempo, pero la cereza del pastel fue mi padre Salvatore Rossi. Robo agravado, asesinato de un feto, vandalismo, maltrato intrafamiliar y trauma emocional, esa mezcla tan desafortunada me llevó aproximadamente medio año tras las rejas. ¿La parte más difícil de todo? El logró obtener un abogado financiado por.... ¡Mi padre! con el objetivo de arrebatarme todo. Al mencionar "todo", me refiero a mis bienes, mi posición en la empresa, los fondos que habíamos reunido, mi participación en el negocio de mi padre ¡Todo! Había sido abandonada en la calle sin un solo centavo. Lo positivo era que finalmente iba a poder salir, mi padre finalmente había decidido sacarme de esa horrible prisión infernal. Una de las guardias, de las pocas que se mostraron amables conmigo, me entregó mis pertenencias
—Ya volviste Eloise —comento Allana de manera burlesca al verme entrar al pasillo. Mire toda la casa, había sido cambiada completamente al igual que el personal. Antes, mi hogar lucía una decoración tan refinada que resultaba un deleite visual extraordinario, pero ahora es aburrida, convencional y juvenil. Se asemejaba al tipo de creaciones que una niña de siete años que empieza a hacer cuando se le permite ser "imaginativa". —Si la manera en que decoras piensas, déjame decirte que te faltan un par de neuronas —comentaba con desden con mis llena de ironía al ver la pared de rosa fucsia junto al sofá naranja de la entrada, solo de verlo me pedía salir huyendo. —Serás...—susurro aquella rubia, pero se detuvo al ver a Trevon salir desde una de la habitación. —Eloise, ya llegaste —comento con una enorme sonrisa. A pesar de su deseo de evitar mi presencia, mi padre debió haberle ofrecido algo para que actuara como si nada hubiera ocurrido. Realmente, a mi padre le resultaba beneficioso
La luz tenue y parpadeante de la oficina de Derek contribuyó a crear un ambiente de tensión palpable en la habitación, generando una atmósfera cargada de incertidumbre y misterio. Miré detenidamente por la ventana, observando con detenimiento la majestuosidad de la ciudad de pleno dia, mientras mi mente analizaba minuciosamente cada detalle de la estrategia que estaba a punto de ejecutar. Sabía perfectamente que lo que estaba a punto de proponerle a Derek era un riesgo considerable, pero el profundo sentimiento de rencor hacia mi exmarido, quien me había abandonado en esta situación tan desigual e injusta, era tan abrumador que superaba con creces cualquier atisbo de temor que pudiera surgir en mi interior. Me debí de haber visto increíblemente provocativa y llamativa, con mi deslumbrante vestido rojo ceñido que resaltaba y realzaba mis curvas femeninas. Cuando me di la levanté mi mirada y me encontré con la mirada de Derek, pude vislumbrar sus ojos profundos y su gesto relajado p