—Piénselo, señorita Trina. La vida de Alejandro está en sus manos. Si no ayuda, él sufrirá. Y usted también.

La llamada terminó, dejando a Trina con el pulso acelerado y el corazón helado. Petrov. El verdadero jefe de Volkov. Había aparecido.

Trina llamó a Ivana y Jhosua de inmediato. Les contó sobre la llamada de Petrov, sobre la amenaza. Se pusieron serios y preocupados.

—Petrov es el hijo del socio de tu abuelo, Alejandro —dijo Jhosua, grave—. Es el jefe actual de Volkov. Es cruel. Cumplirá sus amenazas.

—¿Qué hacemos? —preguntó Trina, temblando.

Ivana suspiró, pensando en soluciones. —Debemos ir a la policía. Contarles todo.

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