-Rogers...
-Hola, jefecita linda.
-¿Qué puede pasar un domingo- veo mi reloj y saco la cuenta- a las diez de la noche para que tengas que llamarme?
-Tu cliente favorito que está armando una casa de putas porque no estás aquí.
-Mierda y ahora ¿qué quiere Matías?
-Necesito que vengas a trabajar, todo lo que han hecho es una porquería, no sé porqué te demoras tanto en Estados Unidos, pero necesito que estés aquí ahora ya-.Grita el misógino este sin dejarme siquiera hablar, escucho los gritos de Ro que le pide su teléfono.
-Mira Matías... -Thomas me quita el teléfono, ¿pero de dónde salió?
-Mira estúpido, deja a mi mujer en paz, en estos momentos estamos tomando un tiempo de calidad en familia y tú estás interrumpiéndonos. -los gritos al otro lado del teléfono se escuchaban mientras Thomas cortaba la llamada y yo estaba estupefacta, ¿qué fue lo que dijo? ¿mi mujer? ¿tiempo de calidad en familia? Pero si prácticamente me había secuestrado para traerme aquí.
-¿Qué acabas de hacer Thomas? M