Koizumi, sonriendo mientras corría hacia el concurso, murmuró:

—Ya veo… así que planeas cumplir nuestra promesa de todas maneras. Realmente no tienes remedio.

Pero al llegar, se detuvo en seco.

—¡No puede ser! ¡Olvidé inscribirme!

Justo entonces, alguien la tomó de la mano.

—¿Qué estás esperando? Vas a llegar tarde al concurso.

Era Asuma.

—Me tenías preocupado. Me alegra verte de nuevo.

Koizumi se puso nerviosa.

—Espera… ¿sabes quién soy?

Asuma, con una sonrisa cálida:

—Claro que lo sé. Eres la persona a quien amo.

Koizumi se sonrojó. Antes de que pudiera responder, él añadió:

—Te inscribí por si acaso. Así que no tienes que preocuparte.

Al llegar al área del concurso, Koizumi vio que Ino era la participante número 10… y aún llevaba puesto el traje de hada madrina. Koizumi fue al puesto número 9, justo a su lado. Estaba nerviosa. No sabía si debía decirle a Ino que era ella.

Su amistad había comenzado como una rivalidad. El año anterior, ambas compitieron en el concurso de comida. Empa