Capítulo 93. Encuentro sorpresa
El aire de París olía a lluvia.
Las hojas húmedas del jardín crujían bajo sus pasos cuando Darren se detuvo a unos metros de ellos.
Por un momento creyó estar soñando.
Esa mujer, con un abrigo color crema y el cabello recogido, reía con suavidad mientras el hombre a su lado le ayudaba a sentarse en un banco.
Pero no era un sueño.
Era ella.
—Leiah —pronunció, y su voz le salió quebrada.
Ella giró, sorprendida.
El rostro se le descompuso en una mezcla de incredulidad y miedo.
Darren la miraba sin atreverse a moverse.
Leiah, con una mano en su vientre y la otra aferrada al brazo del hombre junto a ella, parecía dividida entre la sorpresa y el miedo.
—¿Darren? —susurró.
Alexei la miró de inmediato, confundido, mientras el nombre resonaba en el aire como un golpe seco. Fue el primero en reaccionar.
—¿Quién es él? —preguntó el ruso, con un tono firme, protector.
Darren apenas podía apartar la vista del vientre de Leiah, redondo, prominente, casi a término.
Su re