Capítulo 63: Cuando amas, no dañas.
—¿A dónde vas? —preguntó Michael al verla alejarse.
—Nos vamos. Mi madre no se siente bien —respondió Isabel con premura.
—Déjame llevarlas.
—No, para eso estoy yo —intervino Pedro con firmeza.
—Creo que lo mejor es que mi hermano nos lleve. Gracias —añadió Isabel, dejando claro que la conversación había terminado.
—¿Tu hermano? —preguntó Michael, desconcertado.
—Así es, Michael. Isabel y yo somos hermanos —confirmó Pedro.
Michael se quedó sin palabras.
—Isabel… lo siento —murmuró, avergonzado.
—No importa. Ya habrá tiempo para contarte todo —dijo Isabel con prisa, preocupada por el estado de su madre.
Michael respiraba con dificultad. Todo en su vida se había complicado, y el centro de ese caos era Isabel. No quería perderla. No quería que lo odiara. Había intentado matar a Pedro, ahora su hermano. Su padrino, Carlos Robles, le había encomendado protegerla, y, sin embargo, había hecho todo lo contrario.
Y luego estaba Mary... la madre de Isabel. La misma mujer que había obsesionado a