—Me disculpo por eso, se me pasó informarle debido a que quedé tan impresionado con el conocimiento que posee el joven, y el cómo entendió y evaluó todos los planes de marketing y de venta que tenía preparado para el producto. —Dice Gian recibiendo una copa de vino de un camarero —. Que se me pasó decirle. Hasta ahora no me ha informado si la sociedad se va a formar, pero ha sido una nueva experiencia.
Sebastián se queda sorprendido, pues no ha dicho nada de la chica, y la intención de enviarlo es que pudiera atraer a la chica para romper la unidad que hay entre ellos. Al parecer ella no estuvo en la reunión, lo cual le parece extraño viniendo de ese equipo. Puede preguntar directamente, pero entonces se arriesga a quedar mal con la insistencia del tema. Por fortuna, Gian no se da cuenta de esto y sigue hablando para el placer del viejo.
—También tuve la fortuna de conocer a la señorita Mena. —Ambos sonríen ante esto, aunque con diferentes intenciones —. Es agradable, hermosa, y sob