Lara
Las lágrimas me cosquillean la sien cuando resbalan y terminan en mis orejas y cabello.
El corazón me duele y se goza a la vez. Quiero eternizar este momento, mantenerlo en mis recuerdos como algo bonito, pese a que todo lo demás esté mal, aunque Killiam y yo tomemos caminos diferentes.
Sé que es injusto para él y para mi cachorro alejarlos, pero solo será hasta que pruebe mi inocencia y sea seguro ver a Killiam. Entonces permitiré que él vea a su cachorro cuando desee, pero lo nuestro no volverá a ser lo mismo. Incluso, espero reunir el valor para rechazarlo y romper nuestro vínculo.
Ya con el bebé nacido, podré hacerlo sin causarle daño. Por ahora, padeceré las consecuencias de estar unida a él y a la distancia.
Y esta noche será nuestra despedida formal, el cierre de nuestro amor.
Killiam me besa y le correspondo.
Me fundo en el calor de su cuerpo desnudo, reparto besos hambrientos en su piel, dejo que él me toque.
Gimo y disfruto sin reprimir nada.
Simplemente me dejo llevar.