Con lo que me había contado Kendall sobre el embarazo de Paulina, tenía la razón perfecta para cancelar el compromiso.
Salí de mi apartamento decidido a hablar con Domenic, se que se que esto iba a ser un enorme problema, tal vez pierda algunos negocios, pero yo prefería eso a perder a mi hermosa y caótica pequeña.
Fui a la empresa de Domenic, tenía que hablar con él sobre Paulina, y sobre el supuesto embarazo.
Cuando entre a su oficina él me miró y me hizo señas para que me acercara, yo puse los ojos en blanco, esta actitud de prepotencia era tan molesta.
— ¿Como estás? — Me preguntó.
— Exelente — Le contesté mientras me sentaba.
— ¿Que te trae por aquí? — Me preguntó mirándome fijamente a los ojos.
— Quiero hablar de Paulina y de su embarazo — Le dije de golpe.
Domenic parpadeo un par de veces, se veía sorprendido, pero después volvió a su habitual expresión.
— Felicidades cuñado — Me dijo.
Yo me rei un poco, esto era demasiado descarado de su parte.
— No te hagas el imbécil, sabes