—De seguro nadie importante, querida—intercedió la mujer mayor, haciendo un gesto a su hijo para exigir compostura, que él ignoró.
—Deseaba verte hoy. Has estado ausente—sonrió Melody, sin insistir en el tema. Milo no contestó-. Hay un gran evento en la empresa de mis padres, la semana próxima. Va a ser una fiesta súper exclusiva y me encantaría tenerte a mi lado.
—Por supuesto que irá. Milo es un caballero—intercedió su madre, Contestando por Milo como si fuera un pequeño, lo cual lo molestó más.
No había hecho bien su tarea cuando era niño, ¿a qué venía su interés por su futuro?
—Es muy importante para mí. Mi padre ha decidido darme más responsabilidades y soy la organizadora. He tomado la decisión de que la fiesta será de estricta etiqueta. Dorado y negro—dijo, con seriedad.
—Impresionante responsabilidad—dijo Jace, con malicia, a lo cual Melody no contestó.
—Será maravilloso. No dudo que lograré que acuda lo más granado del Estado. No puedes faltar a mi lado, Milo.
Este no se mole