Mundo ficciónIniciar sesiónSegunda Advertencia
Al mismo tiempo en el jardín trasero de la mansión Winters. Serena caminaba despacio, buscando unos minutos de aire lejos del bullicio. Su respiración formaba pequeñas nubes en el aire frío de Londres. Había soportado sonrisas falsas, miradas inquisitivas y el peso de su propio apellido. Solo quería unos segundos de calma.
Las luces doradas de la recepción se filtraban entre los ventanales, dibujando reflejos sobre las fuentes y las estatuas antiguas en tanto recorría el lugar disfrutando el aire fresco.
Pero la calma terminó al oír su voz.
- Serena. - murmuró Damian, apoyado en el borde de una columna de mármol cuando la vio - Siempre has tenido la mala costumbre de huir cuando las cosas se ponen interesantes.
Serena se detuvo un instante, pero no le dio el gusto de girarse.
- Buenas noches, Damian. Deberías







