24
El ruso arrancó su camisa de su cuerpo y limpió la humedad rojiza de su piel con esta misma. Dio un paso hacia adelante haciéndome brincar del susto.
—Te voy a matar… —Corrí hacia un trozo de vidrio y lo amenacé con esta misma para que no se acercara a mí.
Mis piernas temblaron cuando el mismo colocó el trozo de vidrio sobre su pecho.